La madera no tratada, conocida como madera bruta, necesita ser tratada y mantenida regularmente.
Por lo tanto, hay que tener en cuenta ciertas obligaciones:
- Tratar la madera en bruto con un fungicida e insecticida
- Limpiar la madera una vez al año con un cepillo
- Trate la madera cada año con un saturador, un tinte o una pintura microporosa.
Sin estas precauciones en la madera, el producto no podrá permanecer en el exterior ya que no estará protegido.